PRV 177.2 - El Negrete (Utiel)

DATOS DE LA EXCURSIÓN
Fecha: Domingo 18 Febrero 2007
Senderistas: 18 (Alberto, Bea, Benito, Carlos, Clara, Jaime, Jessica, Joaquín, Jose A., Jose, Paco, Mar, Marta, Monica, Rafa, Ruth, Teresa, Jose M.)
Lugar de inicio: Ermita del Remei
Hora de inicio: 10.40h
Duración: 3h 35m – 4h 15m (en función del ritmo de cada uno)
Distancia recorrida: 13km (aprox)
Dificultad: Fácil
Recorrido: Ermita del Remei – Zona d’esplai infantil – Zona d’acampada – Carril en direcció a la casa Chula – Pineda i partida del Losar – Tallafocs (pino de cuatro garras) – Rambla de la Chula – Casa de los Mancebones – Ctra. d’Estenas (CV-392) – Rambla d’Estenas – Zona recreativa los Mancebones – Aldea d’Estenas – Turons de vinyes i ametlers – Ermita del Remei

MAPA DE LA RUTA

Cómo llegar:
Para ir a Utiel desde Valencia hay que tomar la autovía A3. Después de pasar Requena, a unos 10 km hay que salir de la autovía en la salida correspondiente a “Utiel”. En la primera rotonda que nos encontramos hay que tomar la salida correspondiente a la N-330 (Teruel, Zaragoza). En la segunda rotonda, tomar la salida a la derecha, correspondiente al desvío hacia la CV-390 (Benagéber). Una vez en Casas de Medina, tomar el desvío a la derecha hacia la CV-391 (Ermita del Remei). A los dos km podemos desviarnos hacia la derecha, al área recreativa El Remedio, o seguir hasta la Ermita del Remei. El trayecto en coche dura aproximadamente una hora desde Valencia.

Descripción de la ruta:
Nosotros tomamos el desvío que hay antes de llegar a la Ermita, y dejamos los coches al lado de la primera casa que nos encontramos, a mano izquierda. Desde allí empezamos la ruta. Justo en ese punto nos encontramos con un panel indicador que separa las rutas PRV 177.2 y la 177.1. Obviamente, nosotros seguimos las indicaciones para la ruta 177.2. Si se empieza la ruta desde su inicio, es decir, desde la Ermita del Remei, hay que bajar por una escalinata de piedra que nos lleva por una zona infantil hasta descender a una pista. Se sigue esta pista hacia la derecha hasta alcanzar el punto desde donde nosotros empezamos la excursión, o lo que es lo mismo, los postes indicadores que separan la ruta 177.2 de la 177.1.

Si no recuerdo mal, esta ha sido la excursión con más afluencia de gente hecha hasta la fecha. Desde aquí, gracias a todos por venir, y espero que os lo pasarais bien. El inicio de la ruta fue duro, no por la pendiente, pues es en ligero descenso, sino por el frio que hacía (5ºC) y el viento. El día nos salió nublado, y durante algún tramo de la ruta nos llovió ligeramente, cosa que le dio cierto encanto (opinión muy personal).

Una vez tomada la dirección de la excursión, pasamos dejando a nuestra derecha una zona de acampada. A partir de ahí, la ruta sigue en ligero descenso por un camino de tierra que nos conduce a un cortafuegos. La ruta está perfectamente señalizada, tal vez por poner un pero eché en falta una mejor señalización en los cambios de dirección, pero en esta ruta perderse es realmente difícil (incluso para nosotros). Tras varios minutos caminando, y siempre pendientes de las señales de PR, veremos como el paisaje de campos de cultivo dejan paso a un bonito pinar. Este cambio de paisaje lo veremos varias veces en la ruta. En este primer tramo ya se pueden contemplar paisajes bonitos, y sobretodo, muy verdes, lo cual se agradece en estos tiempos.

El cortafuegos aparece ante nosotros después de casi 50 minutos en ruta. Llama la atención un pino en medio del cortafuegos con cuatro ramas hacia arriba, el llamado “pino de las cuatro garras” (3.2 km). Si os encantáis con el pino, perderéis de vista la señal que hay justo antes de llegar a ese pino, en un árbol a la derecha de la pista por donde venimos, que nos conduce a otro camino en ligero descenso.

Este camino nos llevará hasta la rambla de la Chula, que seguiremos aproximadamente durante 10 minutos. Al final de la rambla hay que girar a la derecha, siempre siguiendo las señales, que enlaza con un camino forestal. Este camino nos conduce a una casa, precedida por una gran tinaja, y flanqueada por un hermoso ejemplar de encina.

Tras dejar atrás la casa y su encina, nos encontramos con los restos de la Casa de los Mancebones, que tiene a su entrada un árbol que parece que nos quiera indicar la dirección que hemos de seguir a continuación. A unos pocos metros, cruzamos la carretera de Estenas (CV-392), y nos dirigimos al desvío de la derecha, por donde sigue la ruta.

Después de hacer una curva sinuosa hacia la derecha primero y luego hacia la izquierda, se nos aparecen unas escaleras de piedra que nos conducen al área recreativa los Mancebones. Éste es un lugar ideal para almorzar y descansar, siempre que no os corra el vientecito que nos hizo a nosotros. Hasta aquí hemos empleado 1h 15m (5 km aprox) desde el inicio, a un ritmo bastante lento, y siempre por un camino con ligera pendiente en descenso.

La ruta sigue por un camino enfrente del área de descanso (indicado con un poste señalizador), y que se interna hacia la rambla de Estenas. Esta rambla suele estar seca, pero cuando nosotros la hicimos el terreno estaba ligeramente fangoso. Empezamos a ver un paisaje que nos acompañará casi durante el resto de la ruta y que caracteriza la zona: viñas. Este paisaje nos acompaña casi hasta la entrada de Estenas. Atravesamos esta pequeña aldea por su plaza mayor (Plaza El Reguero), que nos deja una curiosa imagen en uno de sus extremos, con un muro coronado con ruedas de carro.

A partir de ahí, ascendemos por un sendero a la derecha, que nos conduce a un tramo donde encontramos más viñas y sobretodo, almendros, que al estar en flor, le daban un colorido especial a los paisajes que conformaban. Éste fue el tramo donde nos empezó a chispear con más fuerza, aunque la mayoría de nosotros iba bien protegido. Realmente, esta es una de las partes más bonitas de la ruta, los contrastes entre los colores marrones de los campos y del verde de los pinos, pincelados con el color de la flor del almendro, hacía que no tomar una fotografía de dicha estampa se convirtiera casi en un pecado.


El camino, por entonces, se ha convertido en una senda forestal, que recorre otro pinar de gran belleza. En este tramos es donde nos encontramos con la única pendiente en subida de toda la excursión, y que no supone ningún esfuerzo recorrer (sí, sé que en este momento algunos componentes de la expedición están poniendo caras de desaprobación).


Ya casi al final de la ruta, desembocamos en una ancha pista que seguiremos hacia la derecha, con una fabulosa vista de las erosionadas laderas que forman la Rambla del Remedio. En 5 min nos encontramos de nuevo en las inmediaciones de la Ermita del Remei, acabando esta bonita y sencilla ruta.